Se trata de las Salas Cunas y Jardines Infantiles; Los Angelitos, Ayun Piüke de Cónquil y la Escuela Municipal Voipir de Ñancul, unidades educativas que con el apoyo de profesionales del Departamento de Educación Municipal, lograron, por primera vez en la comuna, adjudicarse el Fondo de Innovación de Educación Parvularia, FIEP 2020.
La convocatoria, que en su tercera versión, realiza el Ministerio Secretaría General de Gobierno, a través de los recursos “Fondos de Gobierno”, financia proyectos que buscan potenciar la innovación pedagógica y que son creados por las propias comunidades educativas de las salas cunas, jardines infantiles y escuelas.
“El objetivo es financiar la implementación de proyectos que contengan acciones innovadoras para el desarrollo de propuestas con pertinencia a su contexto local y comunitario, así como su implementación en los espacios educativos orientados al aprendizaje y bienestar de las niñas y niños”, explicó Katherine Velásquez, encargada comunal área de lenguaje y proyectos pedagógicos.
Sala Cuna y Jardín Infantil Los Angelitos
Muy felices están todos los integrantes de esta comunidad educativa, que gracias a esta instancia desarrollarán el proyecto “Biblioteca Infantil Colorín, Colorina los cuentos nunca terminan”, que consiste en la implementación de un espacio infantil, que será la principal fuente de recurso para actividades que permitan favorecer, enriquecer y expandir el desarrollo emocional, motor y de las 4 funciones básicas del lenguaje, además de mejorar la capacidad de atención, de compresión, ampliar el vocabulario y estimular la creatividad, imaginación y encanto por la literatura de los niños y niñas.
“Nos sentimos contentas y motivadas para ejecutar este desafío, el que nos brindará un lugar para la magia, la imaginación y el disfrute, en donde, a través de diversas experiencias promoveremos el fomento lector desde la cuna”, comentó Katherine Vergara, directora del establecimiento.
Sala Cuna y Jardín Infantil Intercultural Ayun Piuke de Cónquil
Con la iniciativa, “Chillkawe Ayun Piuke, un espacio para jugar y descubrir el gusto por la lectura”, esta unidad de educación pre escolar, logrará concretar el sueño de implementar una biblioteca infantil.
“Abriremos una puerta para que desde la sala cuna nuestros pequeños conozcan la magia de los libros, despertando en ellos el interés por el conocimiento del universo lingüístico y el dominio de palabras, fortaleciendo también el desarrollo del lenguaje y el gusto por la lectura, además de instar a las familias a participar de esta experiencia junto a sus hijos e hijas”, enfatizó, Patricia Nahuelpán, directora Sala Cuna y Jardín Infantil Ayun Piüke de Cónquil.
Escuela Municipal Voipir de Ñancul
“Juego, aprendo y me siento feliz”, es el nombre del proyecto postulado por este establecimiento y que gracias al trabajo realizado por el equipo de educación pre escolar, integrado por las educadoras de párvulo Marisol Vergara, Carmen Gloria Weissse y Elisa Vicencio, profesora de primer año básico, será posible concretar esta iniciativa que consiste en la creación de tres rincones de juego: uno para el desarrollo del pensamiento matemático, otro para potenciar el lenguaje artístico y la expresión y el último que contempla uno de los sellos educativos de esta escuela, que es el medio ambientalista, el que permitirá estimular la exploración del entorno natural a través del método científico y la experimentación.
“Es una gran motivación para generar cambios importantes en nuestras prácticas pedagógicas. Cada uno de estos rincones contará con materiales y recursos innovadores para los niños y niñas, aumentando la posibilidad de generar en ellos aprendizajes por descubrimiento, entre pares y principalmente a través del juego”, concluyó Carmen Gloria Weissse.