La Región de La Araucanía estará en alerta máxima bajo la condición de “Botón Rojo” hasta el domingo 8 de diciembre, debido a las condiciones climáticas favorables para la propagación de incendios forestales. Así lo informaron el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, y la directora ejecutiva de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Aída Baldini.
En total, 110 comunas de las regiones de Coquimbo, Metropolitana, O’Higgins, Maule, Ñuble, Biobío y La Araucanía estarán en esta condición preventiva durante los próximos días.
El ministro Valenzuela destacó que, aunque existe un 30% menos de hectáreas quemadas en comparación con la misma fecha del año pasado, se ha registrado un aumento del 40% en el número de incendios. “Esto es producto, por una parte, de lo que hemos tenido, como se explicó recientemente, más días de calor comparado con el año pasado, que fue una primavera muy nubosa. Pero hay también falta de cuidado de las personas, que, como sabemos, el 99,7% de los incendios son provocados por acción u omisión, por las personas y por negligencia”, indicó el secretario de Estado.
Por su parte, la directora ejecutiva de Conaf, Aída Baldini, hizo un llamado a la prevención y al respeto de las normativas relacionadas con quemas agrícolas. “En la Región Metropolitana y en La Araucanía aún se pueden hacer quemas de desechos agrícolas o forestales. No así en muchas otras regiones, porque ya tenemos una tendencia al alza del número de incendios y de las condiciones ambientales. Pero estamos en más o menos la misma situación de los años anteriores y se ha ido respetando el calendario, que obviamente puede ir variando de acuerdo con las condiciones ambientales”, explicó Baldini.
Las autoridades insistieron en la importancia del autocuidado y la colaboración de las comunidades para prevenir desastres forestales. “Reiterar ese llamado al autocuidado, cuidar el territorio, y también ayudar, contribuir a las comunidades preparadas”, enfatizó Valenzuela.
El llamado a la responsabilidad ciudadana es crucial en un momento en el que el calor y la sequedad del ambiente podrían desencadenar graves incendios, poniendo en riesgo tanto los ecosistemas como la seguridad de las personas.
Imagen de contexto: Agencia Uno.