El gobierno anunció oficialmente la renuncia de Ximena Sepúlveda Varas, secretaria regional ministerial de Vivienda y Urbanismo (Seremi), mediante un comunicado emitido este sábado. La noticia ha generado conmoción, especialmente después de que hace unas semanas saliera a la luz una denuncia por presunto acoso laboral en su contra.
El comunicado, aunque breve, confirmó que la renuncia de Sepúlveda fue aceptada y que Augusto Bratz Riquelme asumirá el cargo de manera interina. Si bien el gobierno no proporcionó detalles sobre las razones detrás de la renuncia, es imposible ignorar el contexto en el que se produce esta salida.
Las acusaciones de acoso laboral contra Sepúlveda han estado circulando desde hace algunas semanas, generando un ambiente de tensión en la institución. Aunque no se han revelado detalles específicos sobre la denuncia, el escándalo ha afectado la reputación de la Seremi de Vivienda y ha dejado al descubierto problemas internos que requieren atención urgente.
La designación de Bratz Riquelme como subrogante en el cargo plantea un nuevo capítulo en esta controversia, ya que ahora queda en sus manos liderar la Seremi en un momento crucial. Se espera que Bratz Riquelme tome medidas para abordar las preocupaciones internas y restablecer la confianza en la institución.
Mientras tanto, la renuncia de Sepúlveda deja una serie de interrogantes sin respuesta y subraya la importancia de abordar adecuadamente las denuncias de acoso laboral en el ámbito gubernamental. Este incidente destaca la necesidad de promover un ambiente de trabajo seguro y respetuoso en todas las instituciones públicas.