Justicia condena al agresor a prisión efectiva de por vida por delitos reiterados
En una impactante resolución, la Fiscalía de Angol logró que un hombre, identificado solo con las iniciales H.M.C., fuera condenado a presidio perpetuo por delitos reiterados de violación infantil, abuso sexual infantil y abuso sexual propio cometidos contra su propia hija. Estos atroces hechos ocurrieron entre los años 2009 y 2017, cuando la víctima, ahora de 21 años, tenía entre 6 y 14 años.
El fiscal Cristián Gacitúa detalló que los delitos se ejecutaron principalmente en el domicilio familiar en la ciudad de Purén, aunque también se registraron otros incidentes tanto en Cañete como en Angol. Gacitúa subrayó la importancia de la declaración valiente de la víctima durante el juicio, a pesar de su evidente afectación emocional.
“El tribunal debió hacer varias pausas en el transcurso de la declaración de la víctima, considerando su altísima afectación emocional, permitiéndole recuperarse y lograr continuar con su relato”, expresó Gacitúa.
El Tribunal Oral de Angol emitió la condena por los delitos de violación infantil, abuso sexual infantil y abuso sexual propio, todos de carácter reiterado, imponiendo una pena de presidio perpetuo simple. Esto implica prisión efectiva de por vida, con la posibilidad de solicitar beneficios penitenciarios solo después de cumplir 20 años de condena.
Esta sentencia marca la cuarta ocasión en los últimos cuatro años en que la Fiscalía de Angol obtiene una condena de presidio perpetuo por delitos sexuales cometidos contra niños, niñas y adolescentes, reforzando el compromiso de la justicia con la protección de las víctimas.