Hasta la Municipalidad de Villarrica, llegó el Padre Pablo Fernández- Martus Montero, quien por estos días regresa a su natal Madrid, para dirigirse a la ciudad española Getafe, particularmente a una Diócesis Sufragánea de toda la zona sur de Madrid.
Su trabajo en la Diócesis de Villarrica era por un período de 2 años, sin embargo sumaron 10 ayudando en el Seminario a petición de Monseñor Francisco Javier, para ayudar en la formación de los futuros sacerdotes. “Se han cumplido 10 años de hermoso trabajo y ayuda y entonces el Obispo de Getafe que es de donde provengo, me ha dicho que ya he tenido que regresar porque me necesita allá, entonces con harta pena de dejarles pero con gran alegría de volver”.
De estas tierras, el sacerdote se lleva los mejores recuerdos. “Levantarme por las mañanas y ver el volcán, eso alegra el corazón de cualquiera, luego, porque he hecho grandes amistades y gente muy buena que en estos días me han manifestado un cariño absolutamente desbordado. Estoy sobrecogido de tanto afecto que me ha manifestado la gente. Esta es una ciudad muy bonita donde me he sentido muy en casa, muy a gusto, donde la relación es muy natural también con la municipalidad es muy buena, muy cercana de infinita gratitud”.
El alcalde de Villarrica, Germán Vergara, agradeció su gran labor, regalándole el libro “Villarrica, Primera Ciudad Lacustre Historia Inédita”, de la autoría de Guillermo González. “El aporte que ha hecho el padre en estos 10 años ha sido muy grande en Villarrica, por eso mucha gente lo ha despedido, eso quiere decir que ha hecho una buena labor cristiana acá en nuestra comuna. Estamos tristes por su partida pero muy agradecidos por todo el legado que deja. Las puertas de Villarrica estarán abiertas, cuando quieran venir lo vamos a recibir con gran congratulación y le deseamos mucho éxito en su regreso a su tierra natal, España”.